domingo, 8 de agosto de 2010

El problema de Linux no es Windows, es Linux.

De Slashdot: Microsoft Losing Big To Apple On Campus



La barrita roja podría ser Linux, pero no lo es.

Existe gente que usará Windows aunque sea la peor opción. Existe gente que usará Mac OS aunque sea la peor opción. Existe gente que usará Linux aunque sea la peor opción. Existe gente que siente que Dios les ha nombrado comerciales de cierto producto y su razonamiento acaba donde se empieza a hablar del mismo.

Hablo de los fanáticos. Gente que dice que razona pero en realidad no. Lo que hacen es contra-razonar. Primero toman la decisión y luego buscan los argumentos. Entre medio existe un proceso de enquistamiento por el cual la decisión tomada se torna inamovible. "La cosa es así. Punto.". Si les preguntas "por qué", sale el troll que todos llevamos dentro y comienzan a mezclar verdades a medias y topicazos sobre las otras opciones.

En su cabeza, lo inseguro es seguro, lo lento es rápido, lo difícil es fácil, o lo no-interoperable es interoperable. O en el mejor de los casos, lo más inseguro es "suficientemente seguro", lo más lento es "suficientemente rápido", lo más difícil es "suficientemente fácil", o lo menos interoperable es "suficientemente interoperable".

Una forma de solucionar un problema es creer que no existe. Los fanáticos sobresalen en este apartado.

Y luego está la gente normal. Disclamando y resumiendo, en el contexto de este post entenderemos "normal" como "normal respecto a la preferencia por los sistemas operativos".

¿Qué nos dice el gráfico de las barritas? Nos dice que ahí fuera hay un montón de segmentos en los que no hay que haber derrotado a Windows en todos los frentes para poder rascar algo. No nos conformemos con 2 piedras (que haya pocos o muy pocos usuarios de Linux) porque "claro, es que Windows esto y Microsoft lo otro". Windows esto y Microsoft lo otro, sí, pero ¿Y QUÉ?

La gente quiere hacer sus movidas y punto. Si el programa se llama tal o se llama cual, les da igual. Las cosas que funcionan son las que no se ven, y los sistemas operativos y programas que funcionan son los que pasan desapercibidos.



¿Cuál fue el último hombre que pisó la luna? No lo sabe ni Dios, porque hizo su trabajo y lo hizo bien.

Al 97% de los usuarios de sistemas operativos hay que venderles Linux porque hace su trabajo y lo hace bien, no porque sea libre ("ya, pero tiene messenger?"), no porque sea gratis ("windows ya es gratis"), no porque sea open source ("ya, pero van bien los words?"), no porque se pueda instalar en un micro-ondas ("ya, pero va el wifi?").

Hagamos y vendamos software libre en el que el usuario tenga que aprender exactamente 0 cosas nuevas para usarlo. "Eso es imposible sin clonarlo" he pensado; "no hay margen". Bueno, si no sabes hacer algo mejor, simplemente copialo. Cuando vendamos software libre como "mejor en algo que te importa, peor en nada que te importe, y con 0 coste de aprendizaje", se animarán a probarlo.

Pero además es falso que no haya margen. Sí lo hay. Por debajo. Podemos hacer que el usuario pueda olvidar cosas para usarlo. Cuando hagamos eso y lo comprueben, no querrán usar otro.

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